Mi opinión sobre los abusos sexuales en la industria del porno

Por desgracia estos días  hemos conocido nuevas noticias sobre las acusaciones de abusos sexuales por parte del productor de cine porno Torbe, un caso repugnante en el que yo no voy a entrar porque no soy ni periodista, ni abogada ni juez, pero lo que si puedo hacer es hablar de mi experiencia personal cuando he trabajado delante y detrás de las cámaras.

Cuando digo que hablo de mi experiencia personal, hablo desde la necesidad de expresar mi realidad y mis vivencias pero sobretodo sin querer afirmar que es la verdad absoluta y sin mucho menos pretender deslegitimar las experiencias individuales de otras compañeras.

Aclarado este punto quiero hacer referencia a que llevo posando delante de las cámaras desde que tengo 17 años, he posado para un montón de fotógrafxs tanto vestida como desnuda, también he participado en algún rodaje de publicidad y cine convencional y llevo casi tres años en el mundo del porno feminista.
A parte de esto, trabajo como estilista freelance para editoriales y rodajes, así mismo co-fundé mi propia productora porno (ya desaparecida).
Como os podréis imaginar, tengo mucha experiencia tanto delante como detrás de las cámaras y mis ojos han visto de todo, suficiente como para haberme creado una opinión al respecto.

Por si no os habéis percatado, vivimos todos bajo el yugo de un sistema capitalista y heteropatriarcal, sistema que se sostiene principalmente mediante del abuso en mayor o menor medida de la población. Dependiendo de tu nacionalidad, raza, género, estatus social,etc, sufrirás de una manera u otra toda esta represión, llegando en algunos casos a la esclavitud si hace falta.
Partiendo de esa base innegable, es más que obvio que en todas las industrias y en todos los gremios de este planeta,regidos en su totalidad y sin excepción por jerarquías que se regulan bajo dinámicas de  abuso de poder, se crean situaciones de acoso y maltrato.
Eso incluye al porno, si, obvio.

En mi caso particular, teniendo en cuenta que solo he participado en rodajes de porno feminista, nunca he sido abusada directamente de ninguna manera. 
Pero he conocido casos de compañeras a las que no se les ha pagado por su trabajo y a las que se les han prometido escenas a cambio de favores sexuales.
Por no hablar de los contratos abusivos, en los que prácticamente vendes tu alma.
Así mismo he vivido en primera persona el hecho de que por parte de un productor se te insista reiteradamente, llegando prácticamente al acoso a participar en una escena en la que ya has indicado que las practicas que te ofrecen no son de tu agrado al igual que tampoco lo es la compañía que te las ofrece, con la única excusa y aliciente de «te vamos a pagar, es solo trabajo».
Detrás de las cámaras he escuchado comentarios ofensivos hacia las performers o modelos y he visto en más de una ocasión comportamientos babosos por parte del staff.
Y se de buena tinta que hay directores que se metieron en la industria para poder estar en contacto con performers y lo que surja, básicamente lo sé por que no pretenden esconderlo demasiado.

Así que sí, yo como actriz,he tenido la suerte de trabajar con gente excelente a nivel profesional, pero no significa que no hayan personas detestables trabajando en esta industria, como en cualquier otra.
Lo mismo pasa con la fotografía y la moda.
Afortunadamente, la mayoría de fotógrafxs con los que he trabajado han tenido un trato excelente conmigo, eso no quita, que en otros casos hayan intentado meterme mano, me hayan tocado de manera constante con alguna absurda excusa tipo «espera que te pongo bien el sujetador», o me hayan insistido para mantener relaciones sexuales con ellos.
Cuando tenía 17 años y todavía seguía en tratamiento psicológico entre otras cosas para superar un trastorno de la alimentación, un fotógrafo me exigió adelgazarme un par de kilos si quería volver a posar para él, se enfadó muchísimo porque pensaba que yo era más delgada (en ese momento yo pesaba unos 47kg).
En otra ocasión, con tan solo 18 años me encontré sola en una fábrica abandonada con un fotógrafo gritándome que tenía que quitarme la ropa porque quería hacerme fotos desnuda, cuando yo le especifiqué en una reunión anterior que yo no quería hacer una sesión de desnudo. Puedo asegurar que fue algo francamente violento.

Trabajando de estilista he vivido situaciones similares aplicadas a las modelos contratadas para esa sesión.
Fotógrafos que las tocan, que critican sus cuerpos delante de ellas, que se pasan más rato tratando de ligar con las chicas que haciendo su trabajo,etc.

Significa esto que el porno, la fotografía y la moda son mundos retorcidos y peligrosos?
Qué todas las compañías tanto de porno mainstream como feminista están dirigidas por monstruos que maltratan a lxs performers?
Qué todas la mujeres que trabajan en la industria son extorsionadas o se han visto obligadas a trabajar con su sexualidad para salir de una situación precaria?
No, significa que vivimos en un mundo podrido, dominado por el machismo y el ansia por recaudar cumplidos y billetes.

No se, pensad en vuetros trabajos, en vuestros ex-jefes, en vuestra encargada… nunca os habéis sentido abusadxs?
Jamás alguien os ha tratado como basura? Nadie os ha pisado? Nunca un compañero de trabajo os ha tocado el culo?
No se han cometido nunca violaciones en universidades o en cenas de empresa?
El acoso sexual existe, negarlo es caer en un error garrafal pero pretender delimitarlo exclusivamente al trabajo sexual es caer nuevamente en el estigma y la caza de brujas. 

Atari_elle